En el blog de hoy te enseñaremos todos los trucos y remedios caseros que puedes utilizar para quitar cualquier tipo de mancha. Encuentra el truco que mejor te convenga y resuelve todas tus dudas sobre qué pasos seguir y qué productos utilizar.
- Manchas de sangre: utiliza agua oxigenada. Aunque antes de optar por este método, es importante que tengas en cuenta que la prenda que vayas a poner a remojo, en el caso de que sea de color, podría blanquear o incluso estropearse en cierto modo (sobre todo si es seda o lana). Así que siempre será mejor que vayas con cuidado y que antes de aplicarla sobre la prenda completa, pruebes primero a poner una pequeña cantidad de agua oxigenada encima del área manchada, de forma que puedas asegurarte de que no hay peligro alguno de que se estropee la ropa.
- Manchas de vino: espolvorea una capa gruesa de sal sobre la mancha, asegúrate que la mancha queda completamente cubierta y déjala reposar durante una hora. La sal de mesa, cuando actúe, absorberá el vino de la zona manchada, y después serás capaz de eliminarla más fácilmente.
- Manchas de aceite: los polvos de talco son una de las mejores opciones para quitar este tipo de manchas, antes de nada, ayudándote de un papel, asegúrate de quitar bien cualquier exceso de aceite o grasa que pudiera quedar en la ropa. Después, ayúdate de algún producto absorbente para de esta manera secar aun más la mancha de grasa. Después, cubre, generosamente, con talco la mancha de aceite. En este caso, puedes utilizar cualquier tipo de talco, incluso el de bebé, aunque si por cualquier cosa no lo tienes a mano, entonces la sal común o un poco de harina también te servirá. Retira con una cuchara o un trozo de papel todo el exceso de talco. Coge un poco de detergente y agua, ponlo sobre la mancha de aceite y cepilla un poco. Una vez veas que empieza a salir espuma, coge un cepillo de dientes y frota haciendo un movimiento circular.
- Manchas de tinta: el alcohol es nuestra mejor alternativa para quitar este tipo de manchas, coge un disco desmaquillante de algodón y humedécelo en un poco de alcohol, coloca el algodón encima de la mancha de tinta. Repite el proceso varias veces utilizando un disco cada vez. Si quieres que el resultado sea aun mejor, deja secar primero la prenda antes de volver a repetir el proceso. Además, frotar con alcohol te funcionará mucho mejor si utilizas una prenda que ya está seca, aunque después de cada repetición, asegúrate de enjuagarla con un poco de agua (intenta que no sea agua caliente) Déjala secar y ponla en un ciclo de lavado normal.
- Manchas de óxido: quita fácilmente las manchas de óxido con vinagre blanco, lo único que tienes que hacer es humedecer el área afectada con el mismo. Luego, recúbrela con un poco de sal y frótala con las manos o con un cepillo. Déjala secar y, cuando esté lista, lávala como siempre.
- Manchas de grasa: Es muy posible que en diferentes ocasiones te hayas topado con estos tipos de manchas, los cuales se suelen producir muy frecuentemente cuando comemos o mientras cocinamos, y sí, a los mayores también nos pasa.Sigue estos sencillos pasos en el caso de que quieras limpiar el aceite o la grasa de la ropa:
- Pon un poco de jabón líquido encima de la mancha y déjalo actuar durante 10 minutos.
- Utilizando los dedos o un cepillo, frota, con cuidado, la mancha.
- Siguiendo las instrucciones del fabricante, lava la prenda a mano o métela en la lavadora.
- En el caso de que la grasa aun siga persistiendo, vuelve a lavar la ropa aplicando algún tipo de tratamiento previo.
- Manchas de cera: Las manchas de cera de vela producidas en la ropa a menudo dan bastantes quebraderos de cabeza, sobre todo porque suelen venir acompañadas de un colorante que también tendremos que eliminar. No obstante, a diferencia de otras, en el caso de las manchas de cera es aconsejable que primero esperes a que se sequen, puesto que más adelante será mucho más fácil deshacernos de ellas. Espera hasta que la cera se haya secado por completo, puesto que si tratamos la prenda con esta primera aun reciente, correremos el riesgo de que se adhiera con más fuerza al tejido. Ayudándote de un cuchillo de punta redonda, retira toda la cera que te sea posible. Ve con precaución de no hacer demasiado hincapié en el tejido, de lo contrario podrías dañarlo. Cubre la zona manchada tanto por delante como por detrás con una servilleta de papel de cocina. Pon a calentar la plancha de la ropa y, sin utilizar el vapor, aplica calor sobre el papel. A fin de evitar que la mancha se traspase a otras zonas, trata de cambiar el papel de manera frecuente. Continúa planchando hasta que la cera haya desaparecido. Enjuaga la zona manchada antes de meter la prenda en la lavadora. Lava como de costumbre.
10 julio, 2018
